
—Tú no lloraste como las muchachas o como yo. ¿Lloraste antes?
—No era capaz de calmarme cuando me dijeron que mis padres se habían ido.
—Eso significa que te dolió más.
—No. Significa que antes era un hombre libre.
Se sentó en el banco frente al peinador. Contempló la llave en la mano durante unos minutos, intentaba descifrar si encontrarla fue una mera casualidad o alguien la escondió como guardiana de algún secreto. La colocó en el bolsillo trasero de los vaqueros.








Deja un comentario